Noticia desagradable pero que da idea de cómo de serias están las cosas a tan sólo unos días de la «coronación» de Trump como presidente USA.
Según los informes que recibe Sorcha Faal de fuentes rusas (y parcialmente corroborados por esta noticia), la vivienda de la agente de la CIA Katie Malone que trabaja como asesora del diputado Elijah Cummings habría recibido el impacto de un arma de energía, a consecuencia de cuyas llamas han muerto seis de sus hijos.
El tal Cummings es el congresista que dio comienzo a la histeria antirrusa para perjudicar a Trump y calificarlo de traidor, con el fin de legitimar su inmediata destitución, en lo que se conoce en la jerga de los ingenierios sociales como el «complot Zinoviev» (en «honor» del complot contra un hombre que intentaba hacer la paz con Rusia en 1924).
Actuando por órdenes de Cummings, la agente de la CIA Malone cuya casa ardió el pasado jueves se habría reunido con otros sospechosos de colaborar con la CIA, de nombres John Schindler y Matt Harrigan, que tienen en común haber declarado la necesidad de asesinar a Trump.
Siempre según estas fuentes rusas, la familia Bush habría contratado al agente del M16 británico para que extendiera los rumores sobre Trump que hoy pueblan la prensa internacional, pero que están contrarrestados por las fuerzas patriotas norteamericanas, y que apoyan a Trump, y agentes rusos contratados expresamente por el magnate. De la información de Sorcha Faal se desprende que ha sido la propia Rusia la que está avisando a la CIA de hasta donde llega su poder. Al parecer, Katie Malone forma parte de la «mafia mormona» que participó en el asesinato de Kennedy (ver noticia anterior que revela que los patriotas tienen pruebas que incriminar a Bush Sr. en el asesinato de John Kennedy a Hillary en el de su hijo, John John).
El mencionado Harrigan (con el que se reunió la agente Malone) es el director de una empresa de seguridad informática ligada a un fondo de la CIA, a su vez relacionado con uno de los fundadores de Facebook, que decidió no censurar los mensajes que piden el asesinato de Trump.
Por su parte, John Schindler es un ex analista de la NSA y profesor en la escuela naval militar, que advirtió horas después del suceso de que la CIA iba a matar a Donald Trump.
Como veréis, la cosa va en serio.
PD: Cambio de última hora de la persona responsable de la seguridad en la proclamación de Trump (labor de la Guardia Nacional). Lo mismo que sucedió en el asesinato de Kennedy.
