General, Política actual — 20 abril, 2013 at 5:55 pm

El atentado de Boston ocurrió así (muy probablemente)

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Antes de que la Paranoia se apodere de los Estados Unidos, es preciso ordenar un poco los datos que están apareciendo, porque con los que ya han aparecido podemos vislumbrar cómo sucedió.

1-Primero de todo, es preciso no perderse en la hipótesis de que dos chavales hayan podido montar la ola de atentados que ha sufrido Estados Unidos en los últimos días. ¡Ojo! No sólo Boston sino en una fábrica de Texas, el envío de cartas envenenadas a Obama y otro representante y otro suceso en Florida que ha quedado eclipado por lo de Boston. Además de los terremotos en Irán, China y Rusia: ¡justamente, los enemigos actuales del sistema monetario sionista!

Todos esos atentados están tratando de generar el caos en Estados Unidos y ha de haber un móvil y una organización tan poderosa como para desarrollarlos en el país más vigilado del Planeta.

Desde luego, los chechenos no han podido ser. (Ahora, además, se sabe que estaba por la verdad del 11-S).

2-Es preciso recordar que los Navy Seals detuvieron en la escena de los hechos a un agente saudita, que fue liberado repentinamente, tras un viaje relámpago del ministro de asuntos exteriores de aquel país.
Os interesará conocer que el jueves 18, MICHELLE OBAMA VISITÓ EN EL HOSPITAL A ESTOS DOS SAUDITAS: Abdul Rahman Ali Isa al-Salmi al-Harbi y Noura Khaled Saleh al-Ajaji. El primero de ellos, familiar del amigo de Bin Laden, Khaled bin Ouda bin Mohammed al-Harbi.

Que los servicios secretos chechenos están dirigidos por El Mossad israelí es un secreto a voces hoy día, y que Arabia Saudita sigue sus dictados, también (aunque es menos conocido).
[MUY IMPORTANTE: ISRAEL PAGÓ EL ÉXODO DE CHECHENOS (judíos y no judíos) A ESTADOS UNIDOS EN LOS AÑOS EN LOS QUE ESTOS CHICOS LLEGARON ALLÍ].
Las declaraciones de la madre de los muchachos, aclarándonos que el FBI les tenía controlados son definitivas: eran agentes manipulados por ellos, que bien pudieron ser engañados para que llevaran las mochilas.

3-En sus últimos informes, el agente Tom Henegan está dando cuenta de las presiones sobre Bernanke, jefe de la Reserva Federal, por parte de Lagarde (FMI) y Jack Lew (Tesoro Americano) para que deje de inventar dinero inexistente (derivados de deuda) llevando a su país a la bancarrota.

Henegan afirma que los dos sauditas que en realidad cometieron el atentado fueron enviados a Liechtenstein cinco horas después del suceso bajo pasaporte israelita, gestionado por el ex número dos de Obama, y con nacionalidad israelí, Rahm Emanuel. Al parecer, fue él quien ha organizado estos atentados, con la ayuda de mercenarios de Blackwater adscritos al MI6 británico, los hemos visto con sus gorras de The Craft.

Todo esto ocurría mientras se celebraba una reunión en Nueva York entre Lagarde y Jack Lew en la que lanzaron un mensaje a Obama para que ejectura los acuerdos fiscales entre el FMI, Estados Unidos y los bancos de Austria que dan pie a la liberación de los Fondos «Wanta» que dan inicio a un nuevo sistema monetario. Los atentados han sido organizados por esta élite sionista para desviar la atención y chantajear a los negociadores.

4-Con estos datos, podemos intuir que, como mucho, los dos jóvenes chechenos fueron engañados por los agentes sauditas (que actuaron como enlaces de El Mossad) y les debieron convencer de que llevaran las mochilas sin decirles lo que llevaban dentro. Aunque también pudieron ser los sauditas, claro. En todo momento, quien quiera que lo hiciera estaba siendo controlado por los agentes de Blackwater The Craft que hemos visto claramente en las fotografías. Los Navy Seals (servicios de élite de la marina), contrariamente a lo que publiqué hace dos días, hicieron bien su trabajo y detuvieron a los responsables pero el traidor Obama liberó a los verdaderos autores del atentado para que no quedara rastro de quien lo organizó y se quedó con los «pringaos», es decir,  con los chechenos. Los «tontos útiles». Ahora tienen que demostrar que dos chavales han conseguido poner en jaque a todas las agencias gubernamentales USA durante tres días y hacer explotar bombas en diferentes ciudades (no olvidemos el resto de sucesos, ojo, porque aquí reside la clave).

La única nota positiva de toda esta locura es que nos indica el grado de desesperación de la élite sionista y confirmaría la presión que se está poniendo sobre la Reserva Federal: estos atentados han sido la única forma que se les ha ocurrido para retrasar lo inevitable.