Seguro que os estaréis preguntando por la verdad en torno a este «asesinato gore» en Londres, en el que las cámaras de televisión logran entrevistar a los asesinos, como si formaran parte del propio «staff» del asesino. Antes de que comiencen a filtrarse los datos que prueben la conspiración, es preciso que os hagáis las siguientes preguntas:
-¿Cómo es que llegaron tan pronto las cámaras al lugar del suceso?
-¿Por qué los asesinos no se han marchado corriendo y, en lugar de ello, «esperan» a que lleguen los periodistas?
¿Le véis alguna lógica a esto?
Evidentemente, no.
En el año 1992 se estrenó una película belga llamada «Sucedió cerca de su casa» en la que un equipo de TV acompañaba a un ladrón y asesino en sus fechorías. Fue el comienzo de los reality shows tipo «Sucedió en Madrid» que, por cierto, se pusieron en marcha justo después de su estreno (y en el que yo participé durante un año).
[Estaría muy bien que alguien la encontrara la subiera a «Red Jedi Evolution»: ¡fliparíais!. Muy recomendable también «El ojo público», con Joe Pesci].
Al tiempo, el FBI asesina ¡en un interrogatorio! a un amigo de los chechenos de Boston, que ya se «olía» que le iban a endilgar algún crimen. ¡Hala! «Lo asesinamos en un interrogatorio y nos quedamos tan anchos!
Bueno, evidentemente, cuando la realidad se torna tan «freak» es porque algo está sucediendo que quieren ocultar con estas tropelías.
La más a la vista es el asunto del ataque al consulado USA de Bengasi en el que, como vengo diciendo, han ido apareciendo pruebas que inculpan a Hillary Clinton, entonces secretaria de estado, como autora intelectual.
Todo indica que a Petraeus, entonces jefe de la CIA, le montaron el conocido escándalo sexual porque había revelado la verdad de lo sucedido allí, cuyas implicaciones alcanzarían al mismísimo presidente Obama. El asunto es que está apareciendo en medios como el Washington Post, lo que ha llevado a nuestro amigo Tom Henegan a afirmar que el tornado de Oklahoma se produjo para ocultar esto mismo.
En su último informe titula que «la administración Obama-Bush-Clinton-Holder está fuera de control» a consecuencia de las corrupciones que los acechan.
Entre ellas, hay una que gira en torno a Corea del Norte, y que no explica muy bien, pero que parecer querer decir que es a través de este país como controlan la divisa japonesa, el yen.
Y dice: «cuando veáis que se habla de amenazas de Corea del Norte, es una mierda destinada a manipular el valor de la divisa japonesa, yen».
¿Recordáis que hace unos días se hablaba de que Corea del Norte había lanzado unos misiles de corto alcance? ¿Qué ha pasado con la bolsa japonesa?
Esto: y la noticia hace referencia expresa a unas declaraciones de Bernanke, jefe de la Reserva Federal, como detonante.
Según Henegan, el gobierno nipón ha avisado a la Reserva Federal y el JP Morgan que dejen de manipular el precio del yen japonés porque su propia divisa está atada a él, y podría sufrir las consecuencias.
Henegan confirma que la familia de Petraeus fue amenazada por el Grupo Adamus que controla la NSA si el ex jefe de la CIA revelaba lo que sabía acerca de la implicación de Hillary Clinton en el ataque al consulado USA de Bengasi. Asímismo, afirma que tanto el fiscal jefe del distrito de Columbia como el jefe de los Marshalls están en disposición de evidencias proporcionadas por los servicios de inteligencia de la marina que prueban que Hillary conspiró junto con la CNN y el Washington Post para quitarse de en medio a Petraeus.
Se entiende que tienen los emails que lo prueban.
Por último, Henegan nos cuenta que el tornado de Oklahoma fue creado con tecnología escalar Tesla consistente en formar dos «frentes tormentosos» que combinados en una estructura molecular a gran velocidad pueden provocar un «accidente» meteorológico como éste.
Lo mejor de todo es que nos brinda la compañía capaz de hacer esto.
Apuntadla bien: se llama Type Works, está en Little Rock (Arkansas), pero sus cuarteles generales están… ¡EN HAIFA, ISRAEL! Con conexiones con la NSA y la CNN de Ted Turner (el ecologista, sí).
