Comenzaron por Volkswagen: un asunto sobre las trucadas emisiones contaminantes de sus vehículos que, de repente, se convierte en el tema número 1 de la prensa (sionista) occidental. Y a partir de ahí, dan un salto cualitativo. Con el paso de los días, la misma prensa la ha tomado con la Siemens y, en general, con el mundo empresarial alemán.
¿Qué está pasando que todas las noticias tienen como objetivo denostar a Alemania?
Si retrocedemos unos días, nos daremos cuenta de que la campaña contra los intereses industriales alemanes comenzó justo cuando Angela Merkel reclamó acercar posturas con el presidente sirio Assad y aceptando la intervención rusa en Siria.
Han creado artificialmente (sobre una noticia que parece cierta, por otra parte) una conspiración para hundir a Alemania y chantajearla así para que retire su apoyo a Rusia. Campañas como las que se ejercieron previamente contra Venezuela, contra Bolivia, contra Irán o Argentina; siempre que un país se acerca al BRICS realizan una campaña de descrédito.