Hace unos días, mi colega Alex García realizaba una entrevista, Boira Misterio, que está llamada a cambiar la percepción que el ser humano tiene sobre sí mismo. En ella, el investigador inglés (?), Lloyd Pie, relataba el excepcional descubrimiento de un cráneo «humanoide» que los científicos consideran no es el resultado de una malformación ni de una trepanación ritual indígena y apuntan a una procedencia extraterrestre. La entrevista es de un valor incalculable porque accede al mayor secreto de todos los tiempos: El origen del ser humano, la imposibilidad física de encontrar el «eslabón perdido entre el hombre y el mono» y de que una mutación haya podido crear a un ser capaz de proyectarse en el tiempo y de generar sentimientos místicos. El descubrimiento, en Méjico, hace ya setenta años, del cráneo «del niño de las estrellas» apunta a la manipulación genética del ser humano por parte de una civilización superior. De verdad, no os perdáis la entrevista y la página oficial de esta investigación que conseguirá el ADN del cráneo, el año que viene. Toda la investigación está siendo monitorizada por varios institutos especializados en genética y bajo riguroso método científico. En noviembre, National Geographic proyectará un documental sobre el tema.