Ayer, unos cuantos afortunados tuvimos la inmensa suerte de conocer en persona a Alfred Webre, ex asesor del presidente Carter, y uno de los caballeros (pues todo un caballero Jedi es Alfred) que está comandando la nueva ciencia social de la Exopolítica, es decir, la que se ocupa de las relaciones diplomáticas con otras civilizaciones.
Aunque llegué tarde a la presentación de su libro (editorial Vesica Piscis) en el que explica la Exopolítica, me dio tiempo a escucharle meterse en los testimonios directos de gente que estuvo con el Almirante Byrd en su legendaria entrada a la Tierra Hueca. Le escuché relatar (siempre de acuerdo a documentos y testimonios que conoce) del encuentro entre el Presidente Eisenhower y extraterrestres buenos de 1954, que le exigieron dejar de utilizar la energía atómica como paso previo para donarnos tecnología. (A los tres días, Eisenhower hizo una prueba con la bomba H del maléfico Edward Teller, en el marco de un pacto con reptilianos y grises). Con su voz templada e inmensa humildad, nos relató la civilización intraterrena en Marte con la que ha pactado el gobierno secreto y reveló la relación entre el HAARP y los chemtrails: HAARP actúa sobre la ionosfera lanzando ondas de baja frecuencia que los chemtrails amplifican para, entre otras cosas, realizar control mental sobre la población. Para él no hay duda que el flúor del agua y HAARP unidos es la clave para entender cómo la gente soporta esta esclavitud sin rechistar; están lobotomizados.
Después, tuve todavía más suerte porque Alfred conocía y reconocía mi trabajo (gracias a Pepón, de Exopolítica España) y por eso me fui con él y su editora a una tasquita madrileña donde nos contó cosas que todavía no he podido asimilar, lo siento. Habló de la máquina de teletransportación en el tiempo de la que habla Wilcock llamada «Crono-noséqué» con la que se están las elecciones de presidentes de gobierno (al conocer, con cuantos votos ganaron o perdieron una elección). Dijo que Obama había sido elegido de esta manera y ya, lo último, fue una cosa que contó que, simplemente, se me fue la cabeza.
Mi vida cada vez se parece más a una película de ciencia ficción.
Y todavía no ha empezado el Congreso. Os digo que los días que vamos a vivir en Sitges van a ser los más excitantes de toda mi vida. Mañana miércoles, a las 19’30 Webre presenta su libro en Barcelona Hotel HCC, calle diputación 100, haced lo que podáis por ir, de verdad (habla perfectamente español).
El corazón me late deprisa. Vamos a vivir algo que cambiará el rumbo de la Historia. Que algo Grande salga de la Cumbre y no se quede en bonitas historias. Estoy hablando de una propuesta Planetaria.
En el vídeo que sigue, presentación de la Cumbre, aparece Alfred, ¡y solo es uno de una pléyade de estrellas!