Ayer escucho con las carcajadas más grandes que podéis imaginar la enésima noticia de las bombas que estallan en Mallorca en la que, CURIOSAMENTE, las cámaras de seguridad no pueden filmar a sus ejecutores porque llevaban estropeadas una semana. (Las que se usan para controlarnos nunca fallan, fíjate por dónde, pero cuando se trata de grabar a los terroristas, jamás. Recordad el 11-S). Bueno, pues me resulta igualmente curioso que tanto policía y espía no sean capaces de localizar a los terroristas en una isla, cuando solo tienen que controlar los puertos y el aeropuerto de la isla. Ante tanto despropósito lo lógico sería cebarse en la impericia policial y poner a los «maderos» españoles a la altura de Mortadelo y Filemón. Uno, sin embargo, se acuerda de que la primera bomba estalló el día antes de que el monarca Anunaki apareciera COMO UN SALVADOR en la isla del banquero March, y que las bombitas le han valido para «recuperar» un poco su valía ahora que aparecen declaraciones aludiendo a «su falta de humanidad y sangre azul-fría-reptiliana». (Recordad que el golpista Antonio Tejero daba «vivas al Rey» y son varios los investigadores que proponen que fue él mismo quien se dio un «autogolpe»). ¿Es una hipótesis demasiado arriesgada que la policía antiterrorista investigue a la guardia personal del monarca? ¿Acaso hay una mejor forma de escapar del cerco policial que en el propio séquito real? No, ¿verdad?
Bueno, pues las risas ante la idiotez generalizada llegan al orgasmo cuando veo la tronchante crónica de un «reportero» de la cadena 4 de televisión en Afganistán, ataviado con barba talibana, que entrevista a un supuesto líder de la guerrilla…. ¡A UNOS MINUTOS DE LA BASE ESPAÑOLA! O sea, que el periodista logra en unos días lo que los servicios de inteligencia españoles no son capaces de hacer en años que llevan allí y, ENCIMA, le entrevista a unos metros de la propia base!
¡TÓCATE LOS HUEVOS! O los servicios de inteligencia españoles son rematadamente tontos, o este chico tiene una suerte de aúpa…. O le han preparado la entrevista los propios servicios de inteligencia.
La realidad cada día es más patética. Esta función se parece cada día más a un tebeo de Mortadelo.
Al menos, allí no moría gente…