Siempre según las misteriosas fuentes de Sorcha Faal que ya explicaron el vertido de petróleo en el golfo de Méjico como un ataque de Corea del norte, ahora informan de una supuesta llamada de Obama a Putin urgiéndole a que utilice sus contactos con el presidente chino para que, a su vez, detenga la escalada militar de Corea del Norte, tanto contra su hermano del sur como contra Estados Unidos. Todo ello, una vez que ha quedado claro que un barco de la marina de Corea del Sur llamado Cheonan fue atacado por un torpedo de su hermano del Norte con el resultado de 40 muertos, algo que negaron en un principio pero que originó una reprimenda por parte de su aliado chino y que ahora podría repetirse por la presión ejercida por Obama.
Todo ello se inscribe en un contexto apocalíptico en la propia Rusia, pues el patriarca de la iglesia ortodoxo, Kyril, con mucha influencia sobre Putin y Medvedev, ha advertido del próximo sacrificio de inocentes. Y lo hace con el conocimiento de que el autoatentado del 11-S comenzó con el sacrificio ritual de 10 millones de vacas en Inglaterra en lo que se conoció para el público desinformado como «el mal de las vacas locas» y no fue otra cosa que una ceremonia satánica para honrar a los dioses de la guerra y que se lleva haciendo desde el Antiguo Testamento. (En las religiones africanas todavía subsistentes es conocido el ritual de matar una gallina o una cabra para conseguir un propósito).
La predicción del patriarca de la iglesia ortodoxa viene a cuento porque Japón se prepara para el sacrificio de millares de inocentes animales en un supuesto rebrote de la misma falsa enfermedad del 2001 en Inglaterra. En el horizonte, el crack del sistema económico de estos satanistas, del cual pretenden salir con una nueva guerra.
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