Dejando bien claro que no hay forma humana de saber si realmente el sujeto que se esconde detrás del pseudónimo Sorcha Faal tiene realmente fuentes en los servicios secretos rusos, me hago eco de su último informe en el que explica el último y sorprendente avistamiento en Jerusalén (encima de la Mezquita de la Roca/ Templo del Rey Salomón) y en Utah, estado de los mormones (cosa que no sabíamos, ver vídeo más abajo).
Sorcha Faal asegura que el mando espacial ruso ha elaborado un informe para el Kremlin en el que relata que nuestro mundo fue oficialmente contactado por una fuerza extraterrestre mediante un pulso electromagnético recibido en Jerusalén y emitido por la citada nave que, traducido al inglés, significa «“Be of no fear as [we-it-I] return”. («No tengáis miedo mientras volvemos»). Siendo las palabras [we-it-I] un misterio supuestamente referido a unos ciertos lugares del Planeta. (???)
Seguidamente, el misterioso informador describe la singularidad de los avistamientos en dos lugares tan emblemáticos como la Mezquita de la Roca, de Jerusalén, y el estado de Utah.
La citada Mezquita se erigió sobre la misma piedra donde Abraham estuvo a punto de sacrificar, por orden de su Dios Jehová, a su hijo Isaac, patriarca de los judíos (en la historia musulmana es Ismael) y que, en el último momento, gracias a la intervención de un arcángel, modificó su holocausto por un animal. (De haberlo hecho, no hubiera habido pueblo judío).
Da la casualidad de que Mahoma hizo un viaje desde Meca hasta Jerusalén en un «corcel con alas» con parada en la misma puñetera piedra, desde donde «fue elevado a los cielos» (y se le dijo el número de veces que debían rezar a Allah, 5).
Algo tendrá ese sitio porque, desde entonces, judíos, cristianos y musulmanes llevan peleando por él y, sin duda alguna, es el centro del conflicto en la región de Palestina.
La causalidad aumenta al conocer que los mormones están convencidos de que Jesucristo regresará a la Tierra, vía Utah, y por eso su ángel Moroni aparece pintado en dirección a Jerusalén.
El sorprendente informe acaba con el dato de que el «rayo comunicador» recibido en Jerusalén llegó en la banda de 1420.377 MHz, que es prácticamente la misma que una comunicación recibida dentro del Proyecto SETI el 15 de agosto de 1977 y que se cree es una frecuencia usada por esos seres porque es muy cercana a la resonancia del hidrógeno (1420), que es un gas fundamental en el Cosmos.
Al parecer, el presidente ruso, Medvevev, ha estado en lugares santos de Jerusalén recientemente, persignándose con respeto…
