Totalmente sincrónico. Esto del análisis de la realidad es cada vez más sencillo. A las pocas semanas de que la juventud española se levantara, apoyada en la estructura de las redes sociales, las instituciones estatales comienzan una campaña para convencer a los padres de que la Red es mala.
Las marquesinas de los autobuses de Madrid (en época de poca publicidad) están forradas con estos carteles que muestran a un chaval, con pinta de psicópata, encerrado en una jaula con pinta de… red.
Solución al enigma: ya que hay una generación que se ha enterado de la Verdad por Internet, por lo menos impidamos que la siguiente haga lo propio.
Esto es el comienzo de una campaña «a lo bestia» sobre lo peligrosa que es la Red con el fin de que los padres prohíban meterse en internet a sus hijos.
Atención al desarrollo de esta nueva paranoia mediática.