Los comentarios de algunos lectores bien despiertos se están convirtiendo en parte importante de esta página.
Sigo tu blog desde hace tiempo y últimamente el tema de la «guerra de sexos» me gustaría comentarte que ayer mismo me quedé a cuadros cuando vi en Cuatro a las 23:00 el capítulo de «House».
No se si lo vistes pero trataba el siguiente tema:
Un hombre que daba conferencias a favor de las mujeres y movimiento por la igualdad, se desmaya en plena función y lógicamente lo llevan al hospital donde trabaja el doctor House.
Después de hacerles pruebas averiguan que en una pelea en un
bar le habían dado dos rodillazos en los huevos y sus testículos no producían suficiente testosterona, con lo cual empiezan a inyectarle la testosterona para solucionar el problema. Al principio la mujer del paciente se pone contenta al decirle los médicos que tendrá más actividad sexual. Sin embargo, a medida que avanza el capítulo el hombre se pone más viril y más autoritario (el tener más testosterona) y va dejando de ser el hombre pro-feminista.
La mujer dice que no reconoce a su marido y que ese no es el hombre con el que se casó (se deduce que lo va a abandonar). Su marido que sabe lo que se cuece le pide a los médicos que no le inyecten más testosterona, que prefiere ser “menos hombre” y salvar su matrimonio y sus charlas en los congresos a pesar de que le
advertían de posibles graves efectos secundarios.
Moraleja: Es mejor ser femenino y poco viril para adaptarte al mundo actual, a un hombre, a pesar de jugarte la vida.
Ya que estamos, os pongo este vídeo de una «artista clónica» llamada Kate Perry, que suena exactamente igual que Shakira, Britney Spears, Lady Gaga, Madonna o Cristina Aguilera. El panfleto MK Ultra en forma de vídeoclip es perfectamente claro sobre el tipo de mujer que pretenden modelar: una chica desengañada del amor, se hace marine, se oculta los pechos, se corta el pelo y se maquilla… para la guerra.