Hace más de un año os avisé de que venía una campaña durísima para promocionar la transexualidad. Y en las últimas semanas antes del Cambio de Tiempo, se recrudece. A los modelos transexuales y la noticia-fake del otro día del padre con el hijo trans, se suma este pasado fin de semana, un perverso reportaje de la Noche Temática sobre “el tercer sexo”. Y digo perverso porque es una Obra Maestra de la Manipulación, repleta de afirmaciones estadísticas que pueden hacer mucho daño (porque la gente se las crea), al igual que el mítico “10% de homosexuales” (¿alguien se acuerda ya?). Por ejemplo, que hay un 1% de transexuales y uno de cada 250 intersexuales. ¡Sin gen alguno que lo demuestre! [De paso, están dando la razón al cómic que escribí hace unos meses. ¡Os dais cuenta? ¡Te van a acabar diciendo que has parido un bebé-trans para castrarlo en la incubadora!).
El vídeo se compone de cinco personajes principales:
1-Un militar que pasó por la Guerra del Golfo y se quedó traumatizado. En el hospital le cuentan que tiene ovarios y ello le causa un trauma que le hace cuestionar su sexo.
2-Un travesti de la India, al que utilizan para justificar la existencia del “tercer sexo” desde un punto de vista ancestral-antropológico.
3-Un psicólogo sospechosamente parecido a Steven Greer (con toda la pinta de ser un marine) al que le detectaron un hermafroditismo cuando era un bebé que supuestamente le dejó traumatizado.
4-Una bióloga que intenta justificar la existencia de los hermafroditas humanos ¡atendiendo a los seres más bajos de la escala animal!
5-Una niña de 7 años que en realidad (supuestamente es un niño) y que es el elemento sobre el que se construye la trama pues sus desgarradoras declaraciones pueden llevarte hasta la empatía. Es el elemento central: por eso me detengo ante él. Su padre es un militar que trabaja en una base americana en Japón, aparentemente su apellido “Romero” hace pensar en que es latinoamericano. La madre, Vanessa, es una rubia aria total. El niño/niña es completamente aria, sin un sólo rasgo semítico, y la otra niña, de rasgos japoneses, por lo que ¿es realmente el padre el militar? ¿O son actores? ¿Es una familia real o una representación propagandística?
Partiendo de la base de que ningún padre expondría a su hija a aparecer por la televisión con un tema tan delicado que podría dejarle graves secuelas (¿dónde está la protección del menor?), podríamos dudar de hasta si la niña es un niño, pues la mentira es un componente intrínseco de los manipuladores.
6-Antológica la mención a John Money, el psicólogo que lanzó al mundo la transexualidad. Una locura. Por un lado se reconoce el fraude de su experimento para después justificar el cambio de sexo porque “en el nacimiento, se hace creer a algunos seres que les han hecho creer que son de un sexo contrario al que realmente son”. Ni pies ni cabeza. Gén-ero viene de Genes, recuerda.
7-¡Ah, se me olvidaba! Lo mejor mejor del todo es cuando el travesti indio reconvertido en estrella de la TV dice que «lucharé por que la transexualidad se ponga de moda«. Justo al final del vídeo. Más claro, el agua. Estaría bien que alguien entresacara ese pedacito porque nos hará falta en breves semanas.
Hay que tener mucho cuidado con este vídeo y que sólo se lancen a verlo aquellos que estén dispuestos a llegar hasta el lado más oscuro de la Fuerza…
Sólo para valientes.
PD: Ah, por cierto, España está gobernada por un partido de ideología cristiana y conservadora y la televisión donde se emite este reportaje es pública. A mí me habían contado que el Movimiento gay era de izquierdas.
