Ese «juguete roto» que fue Michael Jackson sigue generando noticias.
Las últimas: que el FBI ha desclasificado documentos que prueban que Jackson se gastó una fortuna en acallar a los niños de los que abusó sexualmente, y la otra, que las drogas con las que le trataban antes de que muriera asesinado, habían provocado que estuviera 60 días sin dormir.