Dentro de estos círculos en los que nos movemos, es el tema más comentado ahora mismo, sin duda.
El anuncio de Mehran Keshe de que es el Mesías ha puesto sobre el tablero el asunto central último de los tiempos que vivimos: la posibilidad de que los grandes maestros de la Humanidad regresen para comandar el paso al Nuevo Tiempo.
Por eso el anuncio de Keshe me parece, desde ya y pase lo que pase, muy importante.
Porque nos coloca a los creyentes ante un dilema: ¿seremos capaces de reconocer al Maestro cuando lo tengamos delante?
Pero todavía más duro es para las religiones mismas: ¿qué protocolo seguirá el Vaticano para decidir quién es el Mesías esperado?
¿Existe ese protocolo? ¿Quién decidirá «éste sí, éste no»?
No me digáis que no es sugerente la situación… Cuando venga «el gran jefe», serán capaces de reconocerle… ¿o le colgarán como hicieron los judíos porque les desmonta el «negocio»? ¡Jajaja!
Personalmente, el que el Mesías viniera con tecnología para liberarnos me parece bastante coherente.
Si de lo que se trata es de ayudar a la liberación de la Humanidad, nada mejor que la tecnología que nos libera.
El asunto, claro, es que hay mucha gente que se ha quedado colgada de la imagen y mensaje de Cristo asociados a su primera aparición y piensa que va a tener la misma pinta que en los cuadros y va a decir las mismas cosas que en los evangelios y con el mismo tono mayestático que en las películas: lo cual me parece un error mayúsculo. Primero porque Dios no se repite a sí mismo y segundo y más importante, porque la situación hoy es muy diferente a la vivida hace 2.000 años. Existen medios de comunicación planetarios y la forma de mentir es mucho más sofisticada. Aparte de que las películas son ficción, obviamente, no realidad.
¿Cómo se presentaría Cristo si apareciera hoy día?
Yo creo que por Internet sería la más adecuada… porque no puede ser controlado por el gran sanedrín.
Como digo, el mero hecho de que una persona como Keshe, que está dando muestras de sacrificarse por la Humanidad con una máxima integridad, se revele como el Mesías, guarda una coherencia digna de ser tenida en cuenta, pero, al mismo tiempo, que este hecho haya sucedido coincidiendo con la citación judicial del gobierno belga (que le persigue desde hace meses)… también puede conllevar que intente conseguir una identificación con Cristo que le proteja… Ya me entendéis…
En fin, por otro lado, asumir ese título es una responsabilidad tan grande que le van a mirar con lupa, y la presión va a ser muy grande…
Puestos a razonar cuál será la prueba de que estamos ante el Mesías, yo siento que algún signo celestial deberá acompañar a esta persona: una muestra divina que apoye su «candidatura».
A mi modo de ver, esa será la prueba de que estamos ante el Mesías (y lo mismo para el Mahdi musulmán y el Maitreya budista).