Hace más de un año os avisé de que las últimas bocanadas de aire de la Bestia serían terribles; la caída de los aviones (y los mil y un atentados y falsos «accidentes» que están ocurriendo en los países que se están saliendo de la moneda sionista) marcan estos últimos estertores del sistema que nos ha esclavizado durante milenios.
Os dije que los asuntos de pederastia dentro de la élite constituirían la «puntilla» y, tras la explosión de casos dentro del parlamento británico, se produjo una redada de 660 poseedores de pornografía infantil.
Remarco la cifra porque no son 500 ni 550, ni 700 ni 725. ¿Vosotros creéis que para la policía no hubiera sido posible pillar sólo a 500 o a 770?
¿Por qué 660?
660 es el número de la Bestia – 6, 666-6. Exactamente.
Me parece un precioso aviso a los satánicos en su mismo lenguaje. El lenguaje simbólico que tanto les gusta.
Significa que los tienen en el punto de mira.
Curioso que las últimas informaciones apuntan a que Alemania, y Francia, se están acercando al BRICS y el último avión siniestrado tuviera mayoría francesa en el pasaje.
Las informaciones que voy leyendo apuntan a que el nuevo primer ministro iraquí ya ha sido elegido y sólo falta el visto bueno de los «caballeros blancos» estadounidenses para que se produzca el comienzo del «reseteo» del sistema monetario.
Si Francia y Alemania están de acuerdo (recordad la reciente detención de Sarkozy), sólo faltaría el Reino Unido, cuya élite está acosada por el escándalo de la pederastia.
En esas condiciones, Israel estaría totalmente sola, a expensas de que su milenario poder (la usura) quedara derrotado.
¿Comprendes ahora la locura del gobierno de Netanyahu?
Sus mensajes poco subliminales, incluyen los mapas de España, Méjico o Argentina, como diciendo, «os pueden caer también a vosotros».
Bueno, también muy significativo el ataque hacker al Banco Central Europeo: un mensaje muy poco subliminal…
A todo esto, dimite el primer ministro ucraniano. Parece claro que ya saben que hay pruebas de que fue el ejército ucranio quién derribó el avión.
Más abajo, os cuento cómo acabaría con el terrorismo y el mal, en general, el nuevo sistema monetario.
Todos los que viváis en España sabréis que tras la conversión al euro afloró el «dinero negro», por la sencilla razón de que tenían que cambiar la moneda y esas grandes cantidades no pasaban desapercibidas.
La vuelta al patrón-oro implicará, tras unos meses, que todos los países tendrán que moverse a ese nuevo «estándar» porque su dinero no valdrá nada en el mercado. De manera que todo el dinero con el que pagan a los terroristas (ver este excelente artículo de cómo actúa El Mossad disfrazado de compañías de seguridad) tendrá que convertirse a otro sistema en el que ellos no tendrán ya «la llave». Las transacciones financieras opacas con las que mueven el dinero los satánicos estarán perfectamente fiscalizadas, de manera que se les cogerá casi al instante. ¿Comprendes ahora los furibundos ataques israelíes, los aviones que se caen misteriosamente y esa velada amenaza en forma de mapa a los países que se unan al BRICS?
