Os decía hace sólo unos días que la serpiente está muriendo a base de morderse la cola: en todos los horribles cuentos de terror acaba sucediendo que la Bestia termina devorándose a sí misma.
El asesinato del fiscal sionista Nisman, a cargo de la investigación del atentado a la sede sionista de Buenos Aires en 1994 que se quiso atribuir a Irán, se está volviendo contra aquellos que lo instigaron al haber generado programas en televisiones argentinas como el que estáis a punto de ver en el que se explica, con pruebas, que la CIA y el Mossad son los responsables de crímenes como éste. Por primera vez (que yo sepa) en una televisión de máximo alcance se utiliza abiertamente el término «bandera falsa», que es el reconocimiento de que la Historia ha sido una Conspiración.
En pocas palabras: el judío argentino Alfonsión encargó al Mossad y Francia la reordenación de los servicios secretos argentinos, que desde entonces están infiltrados. En el año 2002, el jefe de estos servicios secretos recibió una carpeta escrita por la CIA y el Mossad en la que se le detallaba cómo debía echar la culpa a Irán de ese atentado (y el de la embajada israelita en Buenos Aires, ocurrida el año siguiente que explotó con una bomba colocada DENTRO de la embajada y no fuera, como se dijo). ¿Os imagináis la cara que se le va a quedar a los judíos argentinos cuando conozcan que Israel les ataca? (No, esto no es una novedad: durante los años cincuenta y sesenta, los servicios secretos israelíes atacaron a las comunidades judías en el Magreb y Turquía para convencerles de que debían huir a Israel. ¿Os suena el reciente atentado de París?; Atacaron un supermercado de comida judía…).
Aunque todo el programa tiene interés, mucha atención a los últimos veinte minutos en los que aparece el abogado Juan Labaké y anuncia que los conspiradores probablemente van a matar a los agentes de inteligencia argentinos Stiusso y Toma, que son los que conocen los detalles de la muerte de Nisman.
Por cierto, el periodista judeo-argentino que se adelantó a la policía al anunciar el «suicidio» del fiscal judeo-argentino ha huido a… Israel. (La recalcitrante redundancia de esta frase no es culpa del cronista sino ¡de la Realidad!).
Los sionistas no están dejando otra salida a Cristina Kirchner que levantar el secreto del sumario y mostrar las pruebas que relacionan a la CIA y el Mossad con esos atentados… ¡Mucho cuidado con la vida de Cristina en estos días!
