Las inmediatas declaraciones de Alexis Tsipras, nuevo mandatario griego, repudiando a la troika y la deuda insidiosa nada más alcanzar el Poder, están levantando ampollas desde el principio y, de acuerdo a las informaciones que maneja Sorcha Faal, las amenazas de que se está fraguando su asesinato han hecho que Putin haya enviado 125 de sus mejores hombres ¡a Grecia! para protegerlo. [Sorcha Faal no hace esta apreciación, pero me parece inequívoco que el avión griego de la OTAN estrellado era un claro mensaje intimidatorio dirigido a Tsipras].
Ya os había contado de las estrechas relaciones culturales y religiosas que unen a Grecia y Rusia, de manera que el embajador ruso en Atenas, oyendo los rumores de magnicidio, se desprendió de su guardia personal para ponerla al servicio de la seguridad de Tsipras. A las pocas horas, Putin ha ido más lejos y ha enviado a sus fuerzas especiales para cuidar de su vida.
En las últimas horas, Rusia ha ofrecido su ayuda a Grecia para pagar la deuda y el país heleno se ha mostrado abierto a esa colaboración, de manera que las puertas para una eventual «fuga» al BRICS están abiertas. También se ha ofrecido para mediar en las relaciones con Rusia.
En la última entrevista a Jim Willie que he escuchado este fin de semana, aseguraba que Alemania se está cargando de razones JURÍDICAS para repudiar el acuerdo de Maastricht de la Unión Europea por las medidas tomadas por el Banco Central Europeo. Con la ley en la mano, se marcharía con el BRICS, con su moneda basada en oro, al igual que Austria, Holanda y posiblemente Finlandia.
Por otro lado, mi percepción de que Alemania y Rusia se han puesto de acuerdo para reventar la mentira del holocausto se afianza tras comprobar cómo, al día siguiente de que Putin amagara con contar la verdad de lo que las tropas soviéticas se encontraron en los campos de trabajo nazis en Polonia, ¡La biblioteca del instituto de Ciencias Sociales de Moscú ardió en llamas! (gracias a Dios, no se perdieron documentos pero ese sabotaje indica que los sionistas temen que se libere la verdad).