Dicho y hecho. Tal y como os he contado en las últimas semanas, la agenda de los 170 países que van a romper la supremacía del dólar de la Reserva Federal se desarrolla de acuerdo a la agenda que venimos sosteniendo.
Si hace unos días os contaba que a la unión entre el bloque capitaneado por China de la Ruta de la Seda con el Unión Euroasiática se uniría posteriormente el bloque hispanoamericano capitaneados por Brasil, Argentina y Venezuela, aquí tenemos al presidente venezolano Nicolás Maduro anunciando, precisamente, esa unión entre el BRICS y el bloque Unasur que estuvo centrado en el Banco del Sur. Atención a su comentario: «los préstamos que ofrece China a Venezuela no son endeudamiento sino financiación, mientras que el FMI antes imponía un paquete y gobernaba económicamente un país». Fijaos en que dice «antes», dando por entendido que esta etapa HA MUERTO.
Por supuesto, las recientes acusaciones contra el número 2 venezolano, Diosdado Cabello, son una pataleta frente a este movimiento estratégico.
¿Próximos pasos?
Potencias musulmanas que se adhieran al BRICS como Malasia o Indonesia y, por supuesto, el África negra.
Como véis, todo está siguiendo el curso esperado.
