Enola Gay. Muchos nos enteramos del nombre del avión que tiró las bombas atómicas por la mítica canción de Maniobras Orquestales en la OSCURIDAD (??).
Siempre me intrigó su nombre: ¿por qué la referencia «gay»? Os podéis imaginar por donde iba mi imaginación, obviamente: bomba atómica, movimiento gay…
Hasta que el otro día, un amigo citó el nombre de una de las bombas lanzadas: Little Boy. ¡Yo no sabía que las bombas atómicas tuvieran nombre!
Como si tuvieran vida propia, ¿no?
Pues fueron tres, y sus nombres, los que siguen: Fat Boy, Thin Boy y Little Boy. Es decir, Hombre Gordo, Hombre Delgado y Niño.
La versión oficial afirma que la elección del alias del avión que bombardearía Hiroshima fue un homenaje al nombre de la madre del piloto, Tibbots.
Yo me pregunto si por amor a tu madre vas a poner su nombre al avión que va a causar la mayor masacre de la historia de la Humanidad.
-¡Mamá, mamá!: ¡he puesto tu nombre al avión con el que he masacrado a 300.000 personas en la primera bomba atómica que se lanza en toda la Historia.
-¡Ay hijo, qué ilu-sión… qué orgullosa estoy de ti! Ya sabía yo que llegarías lejos!
Ahora que, a mí lo que realmente me parece curioso es que el ejército permita a un piloto que le ponga el nombre de su madre a un avión. Y encima, el avión que va a tirar la bomba atómica.
-Señor coronel: que si me deja usted pintar el nombre de mi madre en el avión.
-El nombre de su madre: ¡pero usted se ha creído que esto es un gabinete de psicoanálisis! ¡Esto es el ejército, cojones!
-Señor: es que tengo un poco de complejo de Edipo, y estoy seguro que lanzando unas bombas atómicas que arrasen una ciudad, ¡me curaría!
-Ah, en ese caso, sí: me ha convencido usted.
(Por la foto veréis que no fue una escritura a mano sino claramente una obra profesional, es decir, del propio ejército).
También se dice que el nombre de la madre provenía de una novela del siglo XIX en el que había un personaje que se llamaba así, «Enola gay». El título de la novela era «Enola o su error fatal«. Que también tiene su miga, ¿no crees?
Otra explicación que está en el ambiente es que el extraño nombre «Enola» (que no se ha escuchado jamás) sería un código inverso de la palabra «Alone», es decir «Solo». Lo cual cobraría algo de sentido porque unido a la palabra «Gay», en el sentido de «homosexual», constituiría una preparación para la nueva bomba atómica que sería lanzada por la élite en el muy significativo año del 69… «El hombre solo acabaría gay».
Pero, ¿y qué tal con los nombres de las bombas?
¿Es mucho suponer que cada uno de los tres tiene su correspondiente resonancia a futuras paranoias que lanzaría el mismo Poder que ordenó ese desastre?
-La epidemia de anorexia: «Hombre delgado».
-La epidemia de obesidad: «Hombre gordo».
-Y, cómo no, la referencia a las redes pederastas de la élite del «niño».
Dicho esto, regresemos a ese gran himno del techno-pop creado por ese grupo de resonancias ocultistas llamado «Maniobras Orquestales en la Oscuridad» y vayamos a su letra, que juega con la indeterminación entre si el cantante habla con el piloto del avión que lanzó las bombas atómicas o si una madre reprende a su hijo por algo malo que ha hecho…
«Enola Gay: deberías haberte quedado en casa ayer».
«Las palabras no pueden describir el sentimiento y el modo en que mentiste». (??)
«Esos juegos a los que juegas van a terminar con más lágrimas algún día».
(…) El siguiente párrafo habla más claramente del avión, pero el consecutivo es más interesante.
«Enola Gay: ¿está mamá orgullosa de su ‘pequeño chico’ hoy?»
¿Está la madre orgullosa de la bomba atómica que mató a millones de personas?
«Ese beso que diste, nunca va a desaparecer…»
¿Quién da el beso al niño; la madre o el pedófilo?
PD: Unos pocos meses después de aparecer esta canción (1980-81), apareció una «bomba» en forma de enfermedad dirigida al movimiento gay, que convirtió en algo romántico la muerte por mantener relaciones sexuales. Su nombre: Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, SIDA.