De verdad que lo estaba dejando pasar desde hace más de un año y no quería tener que llegar a esto, pero han sido ya tantas las personas que me han hablado de sus vídeos (¡hasta una filóloga!) que, por fin, he tenido que ponerme a ver uno. Y me he quedado patidifuso.
La fórmula del éxito de Sergio Pop ha sido muy sencilla: «como todo está al revés, el lenguaje expresa lo contrario de lo que queremos expresar», y entonces se ha ido al sumerio cuando le ha interesado y al latín, cuando le interesa, y al acadio cuando le viene bien, y al griego cuando los otros idiomas no le daban el resultado que EXIGÍA.
Trampa clamorosa. No hay una prueba de que nuestra lengua proceda del sumerio pero, en el caso de que así lo fuera, si ésa es su investigación debería haber seguido por ella, y no recurrir al latín cuando le interesa, al griego cuando le viene bien, y al acadio cuando le conviene.
Segunda trampa. La trampa de la PNL. El que exista un sufijo que coincide con una palabra no quiere decir que tenga ese significado ni que lo incluya.
Por ejemplo, «normal». «Normal» viene de «norma», señor Pop, y el hecho de que aparezca la sílaba «mal» no quiere decir que haya una conspiración para que lo «normal» sea lo «malo» sino porque AL IGUAL QUE «ANCESTRAL», «SENTIMENTAL» O «ACCIDENTAL», el adjetivo a partir de un sustantivo se forma con ese sufijo, y en este caso ha dado esa palabra porque tenía la sílaba «ma» en medio. Nada más.
Otro gravísimo error, propio de una persona que desconoce los mecanismos de la lengua por completo.
El sufijo «miento» procede del latín «mentum» y expresa la acción y efecto de dicha acción. Aquí tenéis unos cuantos ejemplos. Nuevamente, el que aparezcan esas sílabas es producto de la evolución del lenguaje, no de ninguna codificación. No es el único que propone tamañas tonterías: los adverbios terminados en «mente»: «normalmente», «casualmente», etc, no implican que esté la mente de por medio como muchos fanáticos de la PNL proponen sino que es el sufijo para la creación de esos adverbios. Nada más.
Como digo, la gente se ha fiado de las «investigaciones» de Sergio Pop sobre el sumerio [¿de verdad conoce esa lengua muerta?], pero nadie sabe de dónde se ha sacado esos significados que mezcla ¡a su antojo! con las sílabas de palabras, desconociendo que en la lengua romance hay una cosa que se llama raíz y otra sufijo; que en una palabra dé la COINCIDENCIA de que se forme otra palabra entre medias no quiere decir que haya sido colocada ahí a propósito. El diccionario sumerio que yo he encontrado no tiene nada que ver con lo que dice Pop.
Tercer error garrafal: su teoría se basa y enfoca en el castellano, ¿pero y el resto de las lenguas? Si no es válido para todas las lenguas, entonces no sirve como teoría.
Pero es que cuando uno se pone a investigar sobre los significados que da (cosa que estoy seguro que nadie ha hecho), tampoco coinciden. Por ejemplo, con la palabra «miedo» (fear) en inglés. Adaru o Palahu, según pone en este diccionario.
En el minuto 30 de este vídeo que he visto, afirma (sin rubor) que la palabra «culpable» proviene de «nocens» (raíz de «inocente») y se monta una explicación incomprensible para sostener que todo está al revés, y acto seguido afirma que «culpable» proviene del griego (¡Ahora, el griego!), «vagina». Una trampa más. ¿Y por qué no el latín? Porque no le interesa, para poder sostener su teoría.
Aunque se mete con la new age, Sergio es otro gurú new age que pretende desposeer de la culpa (la responsabilidad) al ser humano, echándole la culpa al lenguaje, a quienes manipularon el lenguaje.
No, señor Pop, la incomunicación no surge del lenguaje en sí sino de la mala utilización del lenguaje, el desconocimiento del significado, la pobreza del mismo y, sobre todo, de la actitud del propio ser humano, al no ser claro y buscar sacar ventaja de la indefinición. Errores todos ellos en los que su «magisterio» contribuye al instalar al ser humano en la paranoia.
En este otro vídeo, comete el sempiterno error new age de defender que las emociones no se manipulan y el raciocinio, sí, cuando la realidad es que es justamente lo contrario: el terrorismo, la violencia y la política misma va a las emociones y carecen de discurso racional porque las emociones entran en el dominio de lo inconsciente. Y acto seguido mete el tema del lenguaje de por medio, como si fuera un mal, cuando la realidad es que la riqueza en el lenguaje te permite analizar la realidad con más recursos. O sea, que no se entera.
Ved aquí la etimología de la palabra «preparar» y comparadlo con lo que cuenta.
Podría seguir con prácticamente todos los ejemplos que da, que son oportunistas porque esconde las raíces de las palabras que no le interesan para proseguir con su teoría pero creo que es suficiente.
[Ejemplo: «destrucción» en sumerio, Destroy – ABATU or NAPALU].
Sinceramente, después de ver unos cuantos minutos, hay que coger cada cosa que dice e irse a google a comprobar su veracidad. El problema es que me temo que los seguidores de este señor desconocen por completo el lenguaje y, sobre todo, no han hecho ni una sola búsqueda para comprobar la veracidad de Sergio Pop. Si lo hicieran, se darían cuenta del engaño.
No hay por donde pillarlo, de verdad, y lo siento porque, en realidad, y aún cuando él no lo reconozca, la teoría de que el lenguaje ha sufrido una manipulación -y muchas más que cuenta- las ha sacado de esta web (al fin y al cabo, él ha aparecido hace un año escaso), pero el problema es que, como otras personas, se ha creído que llevando las cosas al extremo, hace el bien, y no es así. Llevar las cosas al extremo conduce a retorcer los argumentos y manipularlos, y sobre todo, perder el sentido común.
El lenguaje es lo más plenamente humano y un espacio que creamos nosotros cada día. Que haya sido manipulado (y lo esté siendo) no quiere decir que todo el lenguaje sea una trampa. El lenguaje lo hemos construido en gran medida nosotros mismos.
Pensad por ejemplo en la palabra «integridad» que procede de «íntegro», es decir, «entero», y da la idea de que una persona que es de una pieza, no se deja corromper. Esto es lo que Pop quiere tirar a la basura. Lo que consiguen las personas que se creen sus absurdos es deshacerse de su mejor herramienta para desentrañar la realidad, y empobrecer su mente, su raciocinio.
Sergio Pop primero ha dicho «esto es así» y después se ha dedicado a encontrar (o inventarse) las explicaciones etimológicas que le han convenido, saltándose las reglas gramaticales, saltándose sus propias normas (¿no era el sumerio el problema?) y el más mínimo raciocinio.
Sergio Pop quiere tirar, en definitiva, «el bebé con el agua sucia de la bañera».
Y eso es un craso error. Abandonadlo, de verdad.