Parece que hay una orden de «arriba» en el sentido de que las estrellas del templo babilónico han de entregar la sexualidad de sus hijos si quieren permanecer en la cumbre.
Tras Angelina Jolie y Will Smith, ahora es la cantante Adele quien viste a su hijo como mujer para «ir más allá de las normas de género»: es decir, para destruir su identidad.
Evidentemente, ese niño ha sido violado; ofrecido por su madre a la élite satánica.
Hombre y Mujer, Opinión y Noticias Externas — 18 febrero, 2016 at 12:30 pm