Las espadas en todo lo alto (y nunca mejor dicho): Arabia Saudita ha enviado aviones de guerra a Turquía para coordinar su invasión sobre Siria, mientras los kurdos, los rusos y ahora, los chinos, los esperan al otro lado de la frontera, dispuestos a ayudar al legítimo gobierno sirio a detener a los terroristas.
La semana que viene viviremos horas de gran tensión porque Rusia y China parecen dispuestas a parar los pies a los turcos y sauditas, y ayudar así, a que se produzcan sendos golpes de estado en esas repúblicas wahabitas.