Si lo pensáis desde una perspectiva mística, esta animación que sigue el curso de nuestra energía yin/yang a través de nuestros meridianos-canales de energía, es de una belleza suprema: describe el mecanismo por el que ese ser tan complejo llamado «ser humano» vive, crea, goza, sufre… y muere.
Yo creo que algún amigo músico podría hacer una canción describiendo esta maravilla en la línea de la ya mítica «Rumba de los pánicos».
Más abajo, os coloco un vídeo de un acupuntor cubano en el que explica de una manera excelente la interrelación entre la sobrecarga de los órganos por trastornos emocionales y sus correspondientes meridianos. Especialmente, os recomiendo cuando explica la correspondencia con la medicina china de la expresión «me lo paso por el forro de los cojones» (con perdón).
Después de ver este vídeo, no os quedará duda alguna de que el doctor Hamer lo que hizo fue actualizar la medicina china y sistematizarla en la relación cerebro-emoción-órgano afectado. ¡Ojito, que lo mismo al vampiro Corbera se le ocurre registrar la acupuntura y empezar a enseñarla como si la hubiera inventado él! ¡Jajaja! (Como hizo con la biodescodificación, al fin y al cabo, una «hija» de la medicina china»).