Una vez recuperadas Mosul y Aleppo, los gobiernos sirio e iraquí (unidos a las fuerzas chiítas transnacionales y Rusia) se preparan para ‘emparaderar’ -a un lado y otro lado de la frontera- a los terroristas que controlan el paso entre Siria e Irak a la altura de Deir Ezzor.
Uno se pregunta (amargamente) cuándo vendrán las Fuerzas de la Luz a liberarnos de la opresión de la política de género/movimiento gay que padecemos en el mundo cristiano a manos de estos terroristas de la izquierda freudiana: ¿es que no se dan cuenta de que esto es tan genocida como las demás guerras, pero intestina?