Atención a esto. Hace unas semanas os contaba que habían aparecido varias criptomonedas avaladas por oro en China y Rusia, que están aceptando el metal en sus bóvedas y, como su número es finito, cada vez menos cantidad de ellas elevan su equivalencia frente al oro. En concreto, el xaurum (la criptomoneda rusa) se cotiza a 0’273 dólares. Hoy domingo 18 de junio, 1000 xaurums equivalen a un gramo de oro, por lo que en este mercado el precio del gramo de oro es de 273 dólares; la onza de oro se cotiza a 8.521 dólares.
Evidentemente, esto está sucediendo en estos mercados de las criptomonedas que, gracias al Zengold chino, estarán avalados por la bolsa de oro de Shangai.
¿Recordáis las predicciones de Jim Willie y Jim Rickards sobre el precio que alcanzaría la onza de oro para avalar el reseteo?
¡Entre 5.000 y 10000 dólares!
En otras palabras: que el bloque BRICS, gracias a la jugada de las criptomonedas, ha elevado YA la cotización del oro al nivel necesario para que se produzca el reseteo, con lo que, de hecho, EL RESETEO DEL SISTEMA MONETARIO SE HA PRODUCIDO YA (como dijo Cliff High hace semanas).
Ello es así porque, al pagarse la onza de oro a un precio mayor en estos nuevos mercados de las criptomonedas, evidentemente, el oro se va a esfumar de las bolsas iluminati (Londres y Chicago) y se va a ir a estos mercados, con lo que, de resultas de lo cual, las criptomonedas avaladas por oro se van a convertir en -parte de- el nuevo sistema monetario.
Así pues -y como vengo anticipando desde hace ya varios años- la agenda para establecer el nuevo sistema monetario ya no tiene vuelta atrás y ‘no puede no ejecutarse’; dicho de otra forma, los protocolos establecidos se están lanzando en las fechas previamente acordadas y con ello, queda perfectamente claro que las criptomonedas forman parte de esa agenda benefactora (por eso el sistema está reaccionando con el ethereum; ¡no apoyéis esa divisa!).
Todo esto está sucediendo mientras el ejército iraquí está a punto de conquistar por completo Mosul que, si recordáis, era una de las condiciones para que se produjera el reseteo, y mientras se produce esa extrañísima ruptura entre las monarquías petroleras del golfo que, según mi intuición, parece una jugada maestra de la ingeniería geopolítica.
Correlacionad este momento culminante de la historia de la Humanidad con las olas de calor que estamos padeciendo y el clímax degenerativo de la sociedad al que los sionistas han llevado a los movimientos feministas y gay, y podréis entender que toda esta locura comenzará a declinar cuando el nuevo sistema monetario alumbre el retorno al orden natural: la política irá de la mano de esta regeneración.
Sólo hace falta tener paciencia, porque está hecho. El camino hacia una sociedad de la abundancia es un hecho.
