El clamor que se extiende por toda España en torno al veneno contra su propio país que se está impartiendo en las escuelas de tres regiones parece que ha encontrado respuesta, y el PP y Ciudadanos se disponen a aprobar una ley para detener el adoctrinamiento.
Al final: el intento separatista puede que comience a revertir la situación (a medio plazo, obviamente, no a corto).