No soy el único que lleva años desconfiando de cómo una simple activista puede pasar de montar performances en la calle a alcaldesa de una de las tres ciudades más visitadas del mundo ¡en tan sólo tres años! Hay políticos que se pasan toda su vida medrando sin lograr cargo alguno y una desconocida se convierte, ipso facto, en la llave para la gobernación de una región tan potente como Cataluña ¿de repente?
Estaba claro que, en cuanto se buceara en la biografía de esta «embajadora del buen rollito» iban a aparecer las pruebas de la conspiración y hoy el diario El Mundo, a cuenta de su revelación como lesbiana en el programa más apestoso de Tele5, nos ofrece unos datos valiosísimos para empezar a comprender el «fenómeno Ada Colau». Veamos.
Según cuenta ella misma, no terminó la carrera de Filosofía porque «su familia no tenía recursos económicos«, lo cual dentro del ámbito izquierdista le da una buena nota como «hija del proletariado» pero he aquí que la nota del diario El Mundo nos revela que (mucha pero que mucha atención): «En el año 2001 ella misma fue guionista y protagonista de una serie de televisión emitida por Antena 3, idea del marido de su madre, llamada ‘Dos más una’. Contaba las vivencias y enredos de tres hermanas, dos de ellas gemelas, en plena adolescencia, narradas por una cuarta hermana mayor«.
¡Wait, wait!
¿Me quieren decir que una tipa que no ha acabado la carrera de Filosofía consigue trabajo como GUIONISTA DE TELEVISIÓN? Evidentemente, es su padrastro el que le consigue el trabajo, pero entonces hay que desconfiar de que su familia «no tuviera recursos económicos», a menos que el tal productor televisivo se enrollara con su madre pocos años después, cosa poco probable porque se dice que estaban casados y Colau nació en 1974 y la serie se emitió en el año 2001, con lo cual se tuvo que escribir en el año 2000.
Pero ojo, que hay más: resulta que sus dos hermanas, actrices, eran las protagonistas de la serie, y ella en un capítulo aparece hablando con una de ellas ¡sobre su novio italiano! (Por cierto que no se parece en nada a su hermana, a menos que sea hermanastra).
A ver: el cuento de Ada Colau se empieza a desmoronar y la creación MK Ultra de esta político «de palo» se convierte en una realidad. Nos falta saber el nombre de su padrastro y si tiene alguna relación con el empresario catalán del mundo audiovisual Jaume Roures, creador de Podemos y del mito «Ada Colau» a través de su televisión La Sexta TV. Roures lleva metido en el negocio de la producción televisiva desde los años 90, a través de Mediapro, y finalmente su televisión se unió recientemente a Antena 3 TV, por lo que es muy probable que el padrastro (catalán) de Ada Colau y el «George Soros catalán» se conocieran, máxime teniendo en cuenta que ambos son de izquierdas. Si se estableciera esa relación, quedaría probado que Ada Colau es un fraude: un fenómeno credo artificialmente, lo cual explicaría su fulgurante carrera que enerva a los veteranos activistas barceloneses. Pero hay algo más. Algo mucho más inquietante.
El que Ada Colau provenga de un entorno televisivo/liberal (dice que entre los amigos de la familia había muchos gays) y que haya vivido el lesbianismo y la bisexualidad con normalidad nos acerca a la hipótesis de que haya padecido abusos sexuales como forma de programación MK Ultra, con lo que el círculo quedaría definitivamente cerrado y confirmaría que estamos ante una esclava MK Ultra o, en la terminología especializada, un «Candidato Manchurio» (en referencia a una vieja película donde apareció esta hipótesis por primera vez).
