Según publica la web rusa Sputnik News, los grupos rebeldes que operan en la provincia de Dará habrían llegado a un acuerdo para abandonar la lucha y, o bien entregarse o bien marchar a la provincia de Idlib. De esta manera, tan sólo un pequeño territorio en manos de ISIS en la frontera con Israel y Jordania protegería al país judío del inminente conflicto con los chiítas.