El diácono argentino sigue «largando» por toda Sudamérica los datos que posee sobre las cuentas secretas de la flor y nata del «socialismo del siglo XXI» en el Banco del que –se supone– es su mortal enemigo: el Vaticano. La inmensa contradicción de que la iglesia esté ayudando a evadir y lavar dinero a los responsables de que la mortífera ideología de género se extienda por Sudamérica es tan grande como que los políticos ateos estén protegidos por la institución religiosa más importante del mundo.
No os perdáis esta nueva entrevista, que introduzco con dos pantallazos en los que se puede ver que Emilio Botín tiene también cuentas secretas en el Vaticano, así como Michelle Bachelet, Hillary Clinton, Diosdado Cabello, Juan Manuel Santos, Daniel Ortega, Peña Nieto, George Soros o Nicolás Maduro. La ex presidenta chilena fue colocada en la ONU (donde está impulsando la ideología feminista y progay) por el Vaticano. Según el diácono, el llamado «proceso de paz en Colombia» ha sido una farsa, dirigida por el Vaticano, que también ha puesto dinero para el resurgimiento del grupo terrorista conocido como las FARC, del cual siempre se ha dicho que fue una creación de la teología de la liberación, ideología creada por los jesuitas. Sonnante dice expresamente que las FARC tienen cuentas secretas en el Vaticano.
En toda esta información hay, sin embargo, una gran duda que no acaban de resolver: esos cientos de millones que los dirigentes evaden en el Vaticano, ¿lo roban de sus propios países o es un tercer país o poder el que se lo «regala» por cumplir su mandato; una especie de soborno a cambio de llevar la agenda a cabo?
Otra duda más es conocer si Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez tienen sus cuentas en el Banco Vaticano.
PD: Para silenciar los demoledores informes de Sonnante, el Papa Francisco ha decidido «abrir» el Archivo secreto del Vaticano. ¿Nos lo creemos?