Lo han quitado de la portada, pero a mí me ha dado tiempo a verlo. El periodista César Cervera ha visto la información del New York Post sobre el mafioso Raimondi, que ha confesado que colaboró en el asesinato de Juan Pablo I, a las órdenes del entonces jefe de la Banca Vaticana, Paul Marcinkus. La trama que contó El Padrino III es real.