En medio de un total secretismo, para evitar la censura, los productores del documental VAXXED, que fue retirado del festival organizado por Robert de Niro, Tribecca, por presiones de la industria farmacéutica, 150 salas en Norteamérica han estrenado la segunda parte, repleta de dantescos testimonios de padres de hijos afectados y surpervivientes de la vacuna para el cáncer de útero, Gardasil.
Entre las cosas que cuentan los productores, entrevistados por InfoWars, aseguran que la pérdida de inteligencia y sentido crítico para cuestionar verdades oficiales como ésta se debe, en parte, a la influencia en el cerebro de los tóxicos que contienen las vacunas. Estamos pues, no sólo ante un problema de salud física, sino también mental.
