Atención porque se empiezan a juntar algunos hechos que invitan a pensar en cercanos acontecimientos.
Ayer viernes 17 de abril Rusia Today (citando a Newsweek) publicaba que Donald Trump había ordenado el despliegue en Washington de una «extraña fuerza militar» para proteger Washington y trasladar La Casa Blanca «si fuera necesario». Pocas horas después, Whatdoesitmean confirmaba la misma noticia añadiendo que el rubio presidente se preparaba para declarar la Ley Marcial, disponiendo de 10.000 hombres que responden directamente ante el secretario de defensa, para después hablar de una extraña polémica entre los militares y algunos «ministros» en torno a las redes 5G (los militares se oponen, mientras el departamento de justicia lo apoya).
Al parecer, la economía china se está destruyendo a causa de las consecuencias políticas del coronavirus.
En el mismo orden de cosas, Q lleva varios días enviando mensajes patrióticos y espirituales (¡está enlazando con un vídeo musical con la figura del «donut» de la energía libre!).
Sus continuas alusiones a la capacidad curativa de la cloroquina, unido a que ahora sabemos que llevan desde el 1 de abril haciendo pruebas con el dióxido de cloro nos indica que ya no siguen los dictados de la industria farmacéutica.
Pero la más importante de las publicaciones de ayer fue ésta que estáis viendo con el logo de las operaciones especiales, que enlazaba a un vídeo de Fox en el que Lou Dobbs aseguraba que las primeras detenciones en torno al Fisagate comenzarían esta semana que viene, lo que daría sentido a las movilizaciones de tropas anteriormente referenciadas.
En antepenúltimo mensaje enlazaba con un vídeo de un soldado ¡en Navidad! haciendo alusión a todas las tropas que, o están alerta en Estados Unidos procedentes de bases alrededor del mundo o están alerta en esos países, y recordando que son los hijos de «George Washington, Kennedy, Martin Luther King, Ronald Reagan y Donald Trump». En la publicación original, se mencionaba expresamente «Maryland, Washington DC, Hawai y más allá».
En suma, este panorama confirma todas las expectativas que habíamos puesto en el mes de abril
Más abajo, el último programa de Detrás de la Razón, en el que participé ayer.