Dando una de cal y otra de arena, el enviado de la OMS a Nueva Zelanda, David Nabarro, a la vez que «alababa» las acciones de Nueva Zelanda (ha confinado a toda la población por una decena de falsos positivos), ha recomendado la manera en la que Suecia respondió al pico de enfermos por el Covid allá por marzo-abril: es decir, sin confinamiento.
En los últimos días parece que Tedros está perdiendo fuerza como máximo dirigente de la Organización Mundial de la Salud, en paralelo con el inminente reseteo del sistema monetario.