La foto de Hunter Biden junto a Obama, que pertenece a un vídeo grabado en la sala oval por Joe Biden en la primavera de 2016, y hallada en el ordenador de Hunter, condujo a un gigantesco soborno. A cambio de que «miraran para otro lado» ante la militarización del mar del sudeste de China, el presidente y su vicepresidente se repartirían 1000 millones de dólares. Hunter Biden hizo de emisario del partido comunista chino, lo que demuestra, sin lugar a dudas, que ambos dirigentes han cometido delito de alta traición contra el pueblo norteamericano.