Una enfermera griega ha quedado paralizada después de recibir una segunda dosis de ARNm. La enfermera de 40 años es madre de dos hijos y ha sido enfermera durante 17 años. La enfermera, cuyo nombre no ha sido revelado, desarrolló fiebre, seguida de un dolor insoportable en todo el cuerpo inmediatamente después de la segunda inyección. La llevaron de urgencia al hospital cuando no podía moverse o sentir sus extremidades inferiores.
