Según Real Raw News, el pasado lunes dio comienzo al juicio militar a Hunter Biden, hijo del supuesto presidente actual. Dada la cantidad de delitos imputados al citado sujeto, y para que el juicio no se alargara innecesariamente, el fiscal avisó de que sólo se mencionarían los más importantes. Biden, abogado, declinó solicitar una defensa y dijo que se defendería él mismo, esgrimiendo una sonrisa forzada cuando entró en la sala esposado. Acto seguido afirmó que ese juicio era un «circo». Soy inocente de todos los cargos. He cometido errores en mi vida, pero esos errores me afectan únicamente a mí. No hay prueba alguna de que haya cometido crímenes en o contra los Estados Unidos. Soy el primogénito del presidente de los Estados Unidos y mi padre se encargará de procesar a esta comisión por haber vulnerado los derechos de un ciudadano de los Estados Unidos, como yo».
Seguidamente, el vicealmirante Randall, presentó como evidencia al famoso ordenador portátil de Hunter Biden y recordó lo ya publicado por The New York Post: que en ese ordenador había pruebas de que Hunter había recibido 10 millones de dólares de un billonario chino, ligado al Partido Comunista, a cambio de presentarle al entonces ex vicepresidente. El antiguo socio de Hunter, Tony Bobulinski, confirmó esas alegaciones, afirmando los Biden comenzaron a recibir dinero del partido comunista chino en 2017, cosa que se repitió en múltiples ocasiones. De acuerdo a los datos extraídos de un segundo ordenador en una residencia de Hunter en California, los Biden habrían recibido 250 millones de manos de agentes del gobierno chino hasta el día de su detención. 75 de esos millones fueron depositados por Chen Dongsheng, con la condición de que una tercera parte fueran empleados en destruir la imagen de Trump, para que no fuera reeelegido. En un email de enero 2019, Hunter le contestó que no se preocupara porque Trump no sería reelegido.
El fiscal le preguntó a Hunter si había recibido esos sobornos por cuenta de su padre y Hunter no respondió, a lo cual el fiscal añadió que el tal Dongsheng es un agente del partido comunista chino y que su padre lo sabía. Los documentos hallados confirman que Hunter ha llevado los corruptos negocios de su padre durante los últimos 12 años. «Hunter era el recolector de dinero de potencias enemigas para conseguir que Joe Biden fuera elegido presidente, y eso es TRAICIÓN».
Hunter dijo entonces que esos ordenadores no son suyos y que los militares habían fabricado esas pruebas. El fiscal le contestó que había huellas dactilares suyas por todas partes. El juicio continuó el pasado martes.
