The Storm Rider ha aclarado más las informaciones vertidas por el periodista Seymour Hersh sobre cómo el gobierno de Biden organizó el sabotaje del gasoducto ruso NordStream II.
Al parecer, los políticos de Washington DC estuvieron discutiendo esta operación durante 9 meses, no si la realizaban o no (estaban convencidos) sino cómo hacerla para que pareciera que habían sido los rusos y no ellos. Finalmente, se la encargaron a una división de submarinistas de la marina, con sede en Panamá City, no adscrita a los Cuerpos Especiales, para que así no se enterara la Comisión del Congreso encargada de fiscalizar este tipo de operaciones (el llamado «Comité de los 8») que, en tal caso, se hubiera enterado de todo.
Sin embargo, y aquí está la noticia, las filtraciones han llegado varios diputados republicanos de la onda de Trump: Tom Cotton y Ted Cruz, que van a lanzar una GIGANTESCA INVESTIGACIÓN sobre el sabotaje del gasoducto ruso NordStream liderado por políticos, militares y agencias de espionaje de los Estados Unidos de América.
Dice que Rusia ha estado callada sobre este hecho por varias razones. [En realidad, esto no es del todo cierto porque ayer pidieron que Biden sea llevado ante la Justicia]. Detrás de lo aparente, los militares Sombreros Blancos USA están colaborando con la inteligencia rusa y Putin para exponer la corrupción del sistema militar industrial USA, colaborando con la CIA, el Pentágono, y el régimen de los Rockefeller y los Rothschild. «Se va a poner caliente», afirma.
«Esta es la razón por la que varios miembros del Tribunal Supremo y del Alto Mando Militar declinaron acudir al discurso sobre el estado de la nación por parte de Biden» (4 jueces no acudieron, lo cual ha sido interpretado como una advertencia).
Vuelve a repetir que se está produciendo una batalla dentro del ejército entre los buenos y los malos: los Sombreros Blancos y los Negros, y esto es la primera vez que sucede: que haya enfrentamientos dentro del ejército USA, el Departamento de Defensa y las agencias de inteligencia.
«Nos acercamos a una ‘casiguerracivil’ mientras el Deep State y las agencias de inteligencia son expuestas por su corrupción».
Y seguidamente suelta otro «bombazo»: «la liberación de los archivos sobre el asesinato de John Fizgerald Kennedy se acerca, al tiempo que el Gobierno Secreto de la CIA y los militares traidores se ve expuesto».
Esto quiere decir, en definitiva, que la exposición del ataque de bandera falsa contra el gasoducto ruso Nordstream, del cual existen documentos incriminatorios en manos de los diputados republicanos, va a «abrir el melón» del asesinato de Kennedy, y llevará a la derrota de la CIA y el Estado Profundo.
Termina diciendo que «Trump está sonriendo. La Montaña Cheyenne [puesto de mando de los militares Sombreros Blancos] está seguro. Confía en el Plan».
