Parece que el frustrado golpe de estado no va a descarrilar el proceso de salida de Turquía de las guerras en Siria e Irak, por lo que los avances del ejército sirio en Aleppo auguran un pronto restablecimiento en la segunda ciudad del país y por tanto, la vuelta de un gran número de refugiados.
Estas declaraciones del ex emir de Qatar acusando a Arabia Saudita (y veladamente, a Estados Unidos) son la prueba de que la unidad en torno al sionismo de los países petroleros de la península arábiga, se resquebraja.