Opinión y Noticias Externas — 4 diciembre, 2011 at 5:17 pm

En Capissha del Monte, tierra de seres de luz… y apariciones de la Virgen

by

Y en esto que «sshegué» a Capilla del Monte, Argentina.
Años soñando con sshegar a este lugar y, cuando menos pensaba en ello, aquí estoy. Bosques encantados, luciérnagas que alumbran la noche, rincones que te dejan en estado de ensoñación… Y acabo en la casa de un ángel llamado Patricia que canaliza a la Virgen.
Así, como os lo cuento.
La sincronía me persigue y esta Patricia es la tercera que aparece en este viaje.
Dos de los organizadores del evento de Santiago están casados con sendas hadas de nombre Patricia (Paty y Pata, son sus apodos) y, al igual que en Iquique, el organizador del evento es un guerrero de la luz (Alejandro, ahora Gaby) que protege y obtiene la inspiración de una canalizadora/maga/ángel, allí Maite, aquí Patricia.
Conclusión: es un hombre con una mujer poderosa a su lado en una unión sagrada por medio de la llama del Amor el que es capaz de movilizar las Fuerzas y obtener la serenidad para dar lo mejor de sí. Ergo: sí, es cierto, la guerra de sexos es el mejor instrumento para detener la llegada de la Era de Acuario (la del Amor, ¿recuerdas?).
Espero poder entrevistar a Patricia/Virgen en estos días porque su información fusiona, POR FIN, el tema extraterrestre con Cristo y la Virgen y la tradición cristiana, y tiene un mensaje que va a traer mucha claridad a una época en la que los falsos profetas proliferan diciendo que «desde el mal se puede evolucionar más deprisa que desde el Bien», que no hace falta hacer nada porque ya está todo descrito, y desvaríos semejantes que son auténticas «armas de distracción masiva». Es decir, desviar a las almas puras y cándidas de su verdadera misión y dejarles dormitando.
Una de las mejores tácticas del Mal es mezclar la información verdadera (80-90%) con la falsa (20-10%): embobados por las manifestaciones de la quinta dimensión, muchos infelices no se dan cuenta de que les están robando… el Tiempo.
Esta tarde daré mi conferencia en Capissha del Monte y durante estos días visitaré los míticos lugares de los que tanto he hablado estos años. La sensación que me queda es que, una vez uno pronuncia un deseo, si continúa con su «misión», al final el cielo le recompensa viviéndolo… ¡Pero sshega cuando uno menos se lo espera!!
De verdad que tenéis que venir por aquí de muchos lugares.
Hay algo especial…