Tal cual. Estaba claro que si el partido feminista renombrado «Unidas Podemos» se acercara al registro clásico de Izquierda Unida (10%) como parece será el caso, los comunistas clásicos volverán a ir por libre. Y eso es lo que, según Voz Populi, le ha dicho Garzón a Iglesias, que ya está pensando en lo que hará cuando deje la política.
El asunto es que ese 10% de los votos ya no serán de un sólo partido sino que competirán por él los de Errejón, los de Garzón y los de Montero (y, por qué no, los de Hogar Social, que desde los barrios, pretenden quitarle votos a la extrema izquierda).