En las últimas horas, Q ha realizado una serie de publicaciones en las que detalla cómo el partido demócrata está entorpeciendo a los republicanos registrarse para votar en las elecciones de California.
Al tiempo, ha reabierto el asunto de los emails del partido demócrata que acabaron en Wikileaks, demostrando que fue el informático de ese mismo partido, Seth Rich, y no los rusos, quien se los proporcionó a Assange. Q está reabriendo el caso, y apuntando directamente a la jefatura de ese partido como los autores del asesinato del informático, exponiendo la cadena de mando, que autorizó esa muerte.
En su último mensaje, se pregunta: «si Rusia no hackeó al partido demócrata, y los servicios de inteligencia norteamericanos apoyaron esa mentira, a sabiendas de que fue una filtración interna, ¿eso qué nos está diciendo?» Acto seguido expone la cantidad de traidores que están teniendo que sortear y anuncia que el partido demócrata va a redactar más artículos para destituir a Trump con el fin de que no haya testimonios en el Senado que desvelen la corrupción del partido demócrata.