Si recordáis, en uno de mis recientes vídeos afirmaba que en Estados Unidos las compañías farmacéuticas lograron la inmunidad respecto a los posibles juicios por efectos adversos de sus vacunas, y me preguntaba cómo estaría la cosa en España.
Bueno: pues ya tenéis la respuesta. Las compañías farmacéuticas están pidiendo al gobierno español que haga lo propio, lo cual, tiene su lado positivo: la segura reacción positiva ante sus demandas del gobierno español se va a convertir en la prueba de que las vacunas no son seguras. Si no: ¿qué les importaría que hubiera demandas?