Si sabéis inglés, os recomiendo encarecidamente que leáis este artículo de NaturalNews en su totalidad, porque explica a la perfección la magnitud y las implicaciones del hackeo de las elecciones a través de sistemas informáticos conectados con varias empresas (entre ellas, una española) y dirigidos, con bastante probabilidad, desde un servidor de la CIA en Frankfurt, Alemania. En resumidas cuentas, el autor pondera que a estas alturas el Departamento de Justicia tiene que tener todas las evidencias de los actores implicados en esa operación y, de acuerdo con el decreto-ley firmado por el presidente Trump sobre «interferencia en las elecciones estadounidenses», está autorizado a congelar los bienes de las empresas y entidades implicadas en ese robo, incluidas las empresas tecnológicas y mediáticas que han colaborado con el golpe de estado. En definitiva, al lado del demostrado hackeo informático de las eleccione, ya no importa el conteo ni las apelaciones por el voto por correo, porque una elección que ha sufrido un ataque demostrado para ser robada, es inmediatamente declarada nula y el robado pasa a ser el ganador. Este artículo es lo mejor que he leído hasta el momento sobre cómo se puede resolver este lío.