Los auditores de las elecciones USA están engarzando todas las pruebas del robo. Es un vídeo que podéis ver en mi canal de Telegram, se muestra el momento en el que, en directo por televisión, a un candidato republicano le restan 32.000 votos en Georgia, lo cual, obviamente, es imposible, pues los votos se van sumando, nunca se restan. Bueno, pues en las bases de datos ahora auditadas está registrado el momento mismo de la «modificación a la baja del recuento», y la procedencia de la IP desde donde se realiza el hackeo (China), que es lo que mostró Mike Lindell en su famoso vídeo: más de medio millón de votos probadamente robados en 19 intrusiones desde el país comunista, con los que cambiaron los resultados de 5 estados.
El jefe de los auditores de las elecciones en Maricopa, Arizona, revela que las papeletas «duplicadas» (porque las originales supuestamente estaban dañadas) no tienen los imprescindibles números de serie ni se encuentran las originales, luego son falsas.
