[Noticia: El sexo masculino se extinguirá por el porno y los videojuegos. Hacen que el hombre no sea capaz de lidiar con la mujer Real].
Un lector llamado Miguel se está destacando al atreverse a indagar en el proceso homosexualizatorio de sus conocidos. Seguidamente, nos revela un caso de alguien que se homosexualizó debido al menosprecio de las mujeres.
He entablado amistad con un «homosexual» hace poco. Bueno, voy a contarte un poco lo que es y lo que ha sido la trayectoria de este hombre de treinta y tantos.
Le he preguntado abiertamente por su adolescencia y por su infancia. Reconoce abiertamente que de pequeño se sentía atraído por las niñas de su clase. El problema comenzó
en la adolescencia. Evidentemente, él no nació homosexual, es una tendencia que adquirió años después. Más que una tendencia fue una solución a su inseguridad y a su falta de
decisión ante el género femenino.
Al parecer empezó a sufrir alopecia sobre los 16 años. Los complejos que esto le produjo le impidieron relacionarse con sus compañeras de forma normal. Evidentemente se sentía
atraído por ellas. Los rechazos y desprecios que el género femenino le dedicó hicieron el resto. Es decir, se cambió de acera… Según me cuenta, a raíz del cambio todo se convirtió en
una vorágine de orgías, alcohol y desenfreno.
Ahora a sus treinta y tantos tiene pareja estable, desde hace ocho, convive y aparantemente lleva una vida normal. ¿Normal? Normal, ni de coña. Atento a lo que voy a contarte.
Resulta que en el mundo de los homosexuales están muy de moda las redes sociales de contactos. Y te preguntarás, ¿con que frecuencia buscan sexo por estos medios? TODOS LOS DÍAS.
Todos los días tienen sexo con uno o dos desconocidos (aparte de con su «pareja») claro. En estas redes sociales para contactos gays (como bender) se permite incluso visualizar la ubicación geográfica en tiempo real del próximo amiguito a conocer (gracias a los smartphone).
¿Qué quiero corroborar con esto? Que son adictos al sexo. Y el adicto no disfruta de lo que hace. Parece un desquite de complejos adolescentes.
En resumen, este chico del que te hablo no es homosexual. Digamos que ha encontrado una forma fácil de tener sexo y de quitarse complejos y frustraciones de encima. O, si quieres decirlo de otra manera, ha encontrado una forma de sentirse masculino. Quizá cuando una persona que tiene estas tendencias se engaña a si misma con el «cambio de acera» esté forzando al cerebro a no producir hormonas masculinas. O a lo mejor se produce una disociación de la personalidad respecto al trauma de la frustración sexual durante la adolescencia. No lo sé. Lo que es seguro es que buscan en esas redes encontrar la panacea contra la frustración de mentirse a uno mismo.
Este chico no nació gay, se hizo gay por circunstancias. Y no tiene una vida sexual sana, tiene una vida sexual adicta basada en el estímulo (vacía e inmadura).
