Una de las pruebas de que estamos atravesando (nuestro Planeta y nosotros) un momento cósmico singular son los cambios que están experimentando otros planetas de nuestro sistema.
Si hace unos días relatábamos los operados en Júpiter, hoy nos detenemos en Saturno, donde hace dos años se detectaron sendos focos de energía que se fundieron en una tormenta que arrasó su hemisferio norte. Las dimensiones de la tormenta: el tamaño de la Tierra. Mientras esto ocurría, científicos del Centro Goddard de la NASA detectaron una masiva corriente de el gas ethileno, inodoro e incoloro, que a día de hoy todavía no saben a qué atribuir, pues es 100 veces superior a lo que los propios científicos creían posible.
Al parecer, este tipo de tormentas masivas ocurren cada 30 años en Saturno, pero esta vez se ha adelantado 10 años.
Por otro lado, el diario ABC publica hoy mismo que la Vía Láctea está engulliendo una nube de estrellas. La pregunta es: ¿cómo se sentirá dentro de esa galaxia el ser absorbida por otra? ¿Habrá días de oscuridad? ¿tendrá todo esto algo que ver con el mítico final de este ciclo del calendario maya?
Más abajo, algunos vídeos de la NASA ilustrativos de los cambios en Saturno. El primero es una animación-recreación del evento.