A los pioneros siempre hay que agradecerles su coraje (¡Gracias, Juan!) pero yo creo que es mejor que hable uno para que se escuche el mensaje con claridad: ¡nos perdemos lo más importante: las palabras «Edad de Oro»!
[En un acto psicomágico, el poder del sonido de la palabra es la clave].
Ya sabéis: tenéis la oportunidad de grabar el vuestro en Nochevieja. Si me llegan más vídeos correspondientes a estos últimos días, los pondré.
Gracias a Juan otra vez.
PD. El objetivo es formar un «mosaico de brindis alrededor del Planeta»: por eso es importante que pongáis en el título, al margen de «Brindis por la Edad de oro de la Humanidad», la ciudad y el país donde se produjo el mágico momento.