Lo tenéis aquí, por supuesto no lo veréis en ningún medio oficial. El abogado Tom Cryer hace honor a su apellido (en español, «llorador») y ha conseguido que un tribunal reconozca que no está obligado por ninguna ley a pagar un impuesto por los beneficios obtenidos de su trabajo. La argumentación que veréis a continuación sigue la siguiente línea: no hay una ley que obligue a pagar el impuesto sobre la renta, por la sencilla razón de que el trabajo no es ninguna renta. Tomad nota porque Estados Unidos impuso su modelo recaudatorio a todo el Planeta. Un gran apoyo para el matrimonio Brown, todavía encerrado y acosado por los Marshalls por similar razón.
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Abogado y el impuesto sobre la renta.
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