Vacío de poder en Arabia Saudita tras la hospitalización del rey Salman. Ahora mismo el hombre fuerte es su hijo Mohamed, quien ordenó la matanza de La Meca de hace unas semanas.
El ruido de sables en Riad durante estos días se va a oír… hasta en Madrid.
PD: Si obráramos con sentido común, una buena parte de los gobernantes del mundo deberían ser hospitalizados en clínicas psiquiátricas por la misma razón: demencia.