[Antonio es amigo de hace muchos años: de mi barrio. Únicamente he censurado una última frase ofensiva sobre el polémico conferenciante].
He leído tus apasionados artículos sobre el angel-demonio Corbera. Yo como te comenté iba a haber empezado la formación con él, había leído sobre Hamer, y bueno, parecía que Corbera era la forma cercana de ir por esa línea. Cercana y bastante cara, lo que ya me echó para atrás, pues si no hay justicia en el precio de algo relativo a la sanación, parece difícil pensar que lo haya en sus contenidos. El negocio salvaje desvirtúa por completo el mensaje original.
Al final, por esas “casualidades” acabé encontrando hueco en la formación de Fleche. Y sin hacerle un panegírico, sí que parece que es harina de otro costal.
En la formación de Fleche no se menciona ni de pasada Un Curso de Milagros, ni se habla de física cuántica, ni tampoco de psicología. Uno de los temas del primer módulo se titula “Bio no es Psico”, que es toda una declaración de intenciones. Tampoco de las teorías del doble de Jean Pierre Garnier (yo sí me he leído sus libros). Y mucho menos se recomienda la soledad ni el alejamiento familiar como terapia recurrente, y no digamos habitual, como hace Corbera. Nunca he oído algo similar en la formación.
Fleche fue discípulo de Hamer y no creo que acabaran mal, como sí pasó con el plagiador de Cobera y los que luego le han plagiado a él.
Lo que diferencia a Fleche, Frechet y otros discípulos con respecto a Hamer son, a mi modo de ver, dos cosas:
· extender el período temporal del bioshock más allá de la vida (post-nacimiento) de la persona. Hamer busca el conflicto en los sucesos vividos por una persona, y así se encuentran muchas correlaciones acertadas, pero en otros casos, ese origen no se encuentra, y se busca en el Proyecto Sentido (idea de Marc Frechet –sicólogo-, que incluye tiempo anterior a la concepción, y también el embarazo) y también en el Transgeneracional (Anne Schutzenberger, Salomon Sellam, la metagenealogía de Jodorowsky, etc).
· Y …tratar de curar! Porque Hamer se esforzó mucho en el diagnóstico del síntoma, no en vano era radiólogo entre otras especialidades, pero hay que ver qué se puede hacer para remediarlo, porque saber la causa de por qué mueres, otorga algo de paz, pero vale de poco.
Con el primer punto lo que se trata de entender es el propósito de la vida, para qué venimos al mundo, y eso es algo muy importante a mi juicio. Venimos al mundo con unas informaciones y unos programas, y eso nos va a condicionar, y a determinar si no lo remediamos, mucho de lo que nos pase. Entre otras cosas los conflictos que viviremos en nuestro tiempo de vida, y que nos desencadenaran las respuestas biológicas que tan bien categorizó Hamer.
Bio-Descodificar sería remontarse hasta el conflicto programante y “desactivarlo”, reconducirlo, para evitar futuras repeticiones de los síntomas. Y eso, guarda relación muchas veces, más con nuestra vida anterior (proyecto sentido y transgeneracional) que con la vida “vivida” por nosotros.
Con lo segundo se echa mano de la PNL, de la hipnosis Eriksoniana, de la sicología transpersonal, las constelaciones, el ungüento amarillo, el agua bendita y lo que sea, porque no nos podemos quedar en el diagnóstico. Y ahí Hamer se ha mostrado bastante terco, o eso se cuenta de él (la retirada de la licencia y la cárcel vienen más por ese lado, que por aportar un nuevo enfoque, según comentan, pero no tengo los datos suficientes para afirmarlo).
El cerebro inconsciente emplea lenguaje simbólico y la PNL puede ser una herramienta válida para que un buen mensaje llegue a ser captado (lo mismo que podría ser empleada para lo contrario, es una herramienta).
Pero es que de esto de aquí que te cuento a ‘deja a tu marido y vete a vivir sola’ dicho en un chat online o en facebook, a tratamientos online, grupales y casi automáticos, o a la obsesión por romper los vínculos familiares, hay un mundo.
Si bien hay que precisar, que en algunos casos huir/alejarse/distanciarse de la familia puede ser la solución que necesite una persona si no es capaz de revertir la situación y enfocarlo de una manera constructiva. Si no puedes perdonar, ser perdonado, ni arreglar la situación, y esto provoca una respuesta biológica grave, la distancia puede ser la salida, siempre repito, que estemos ante un hecho grave que puesto en la balanza con la separación familiar la haga caer de su lado. No por eczemas, o por toses.
Pero nunca podrá ser la primera opción, porque (como remarcamos bastante en la formación), la supervivencia de la especie está antes que la del individuo en nuestro cerebro inconsciente, y la necesidad del clan es muy fuerte, y huir sin aportar un sostén para esos vínculos perdidos, es receta para el fracaso.
Fleche hablaba con respeto y devoción de Hamer, y las 5 leyes biológicas de Hamer son seguidas por la biodescodificación, así como se considera que la enfermedad se manifiesta en tres planos: emocional (origen del bioshock), cerebral (nodos DHS, edemas en las distintas áreas del cerebro) y en el cuerpo.
De lo que se trata es de aportar más herramientas para el diagnóstico (proyecto sentido, transgeneracional) y para el tratamiento (PNL, hipnosis) pero no se desvían de las líneas principales de la Nueva Medicina Germánica.
Teniendo en cuenta que esto no es una “cura para todo” como dicen los opositores a estas teorías. Ni es válido para todo el mundo, pues va a depender bastante del grado de evolución personal de cada uno, porque la curación la hace el paciente y eso ya es un cambio de paradigma muy fuerte. Hay que haber avanzado un poco por estos caminos para poder utilizar este tipo de herramientas, esto no es tomar unas pastillas, lo que reduce de forma considerable su ámbito de actuación.
La cura de todos los males es muy sencilla por otro lado: felicidad, amor, coherencia, equilibrio, compasión, tolerancia. Así no hay quien enferme oiga!
En este sector no todos tienen la misma forma de verlo, Sellam, Fleche, Frechet, Louis Haye, tienen sus puntos de vista, pero tampoco veo a ninguno de estos alabando al demonio o exiliando por decreto a todos los pacientes. Ni plagiando libros ni cobrando hasta por respirar.
